
·S15 E3
Mi vida en creole
Episode Transcript
Esto es Rambulante, soy Daniel Alarcón.
Sandrine Exil nació en Bogotá, rodeada de montañas, pero sus primeros recuerdos son del mar.
Speaker 2Amo el mar y lo bonito, digamos, que tiene Haití es que tienes esa combinación entre montaña y mar muy cerca.
Speaker 1En el 2000, cuando Sandrine tenía tres años, su familia se mudó a Puerto Príncipe, la capital haitiana.
Speaker 2De pequeña recuerdo muchísimo, sobre todo los domingos, que era como el momento divertido.
Digamos que bajábamos ya a la parte central de Puerto Príncipe y poder comer helado y me tomaba fotos también en el campo de Marte, que es donde quedaba el Palacio Nacional.
Speaker 1Jean-Marie, el papá de Sandrine, es haitiano y se había mudado a Bogotá en 1992 para estudiar medicina.
Y Ruby, la mamá, es colombiana, de Ibagué, y también es médica.
Se conocieron estudiando, se enamoraron y al tiempo nació Sandrine.
Como Jean-Marie tenía un consultorio en Haití y necesitaba entenderlo, decidieron mudarse.
Y Sandrine, siendo pequeña, no tuvo problema en acoplarse.
Pero sí notaba una diferencia con los demás niños a su alrededor.
Speaker 2era como de las más claritas de la clase.
Siempre me vieron como un bicho raro, por decirlo de alguna u otra forma.
Speaker 1Su papá es negro, su mamá blanca.
Y en Haití a Sandrine la consideran mixta.
Tiene un tono de piel más claro que la mayoría de las personas del país.
En
Speaker 2Haití el color de la piel va muy combinado con la clase social.
Y siempre, digamos, cuando hay una mezcla es porque, bueno, un haitiano se casó con un blanco, entonces pues está esta mezcla, ¿no?
Speaker 1Destacaba, pues no había mucha gente de familia mixta en su escuela.
Y es que si tienes familiares blancos, muchas veces la gente asume que tienes dinero.
En perspectiva, sí, eran privilegiados.
No vivían con demasiados lujos, pero sí con comodidad.
Y para Sandrine, ser el bicho raro no era negativo.
Y
Speaker 2era más como, bueno, vamos a jugar a la princesa, entonces Sandrine es la princesa, por obvias razones ella es la más clara.
O sea, yo decía, ok, listo.
Speaker 1No lo pensaba demasiado.
Era una buena vida, tranquila, pero permeada por una regla estricta.
Speaker 2Mi papá de alguna u otra forma me tenía prohibido hablar creol.
Entonces hablábamos solo francés.
O sea, yo no me podía comunicar, digamos, con la señora que nos cocinaba, a menos de que fueran francés.
Speaker 1A pesar de que la señora no lo entendiera muy bien.
Porque además del color de la piel, otra cosa que diferencia a la gente en Haití son las barreras del lenguaje.
También es un asunto de clase.
En papel, el país tiene dos lenguas oficiales.
El francés, el idioma impuesto por la colonización europea del siglo XVII, y el creol, o el criollo haitiano, un idioma único de Haití.
Es un lenguaje que nació en la colonia del contacto entre los franceses y los esclavos africanos traídos a la isla.
Y si bien constitucionalmente esos son los dos idiomas de Haití, en la práctica es muy diferente.
El creol es el idioma de la calle, lo que se habla con la familia, con los amigos, pero la educación se da, en su inmensa mayoría, en francés, y esto se extiende a otras cosas.
Los trámites institucionales, por ejemplo, también son en francés.
Una persona que solo sabe creol queda excluida de muchos espacios y por consecuencia de las posibilidades de ascender económicamente.
Entonces, en la casa se hablaba español y afuera francés, nada de creol.
La justificación que siempre dio el papá de Sandrine fue la siguiente.
Speaker 2Para mi papá era súper importante, es algo que recuerdo que siempre decía, que yo tenía que aprender primero francés.
O sea, ya el español lo teníamos en casa, pero que el segundo idioma tenía que ser sí o sí francés.
Si yo aprendía creol primero, no iba a lograr aprender francés nunca.
Esa era su teoría, ¿no?
Speaker 1Era como si tuviera miedo a que las dicciones y las palabras del creol quedaran como un hábito en el francés, que lo contaminaran, de cierta manera.
Su mamá estuvo de acuerdo con el papá de Sandrine.
Ella recién acababa de llegar a Haití, todo era nuevo, y era Jean-Marie el que conocía el contexto.
Además, en el colegio también lo prohibían.
Pero Sandrine sentía que esta regla era injusta.
Era el idioma que escuchaba siempre que salía de la casa.
Speaker 2Para mí el creol era, como escuchaba que todo el mundo lo hablaba, pues era el idioma como divertido, ¿no?
O sea, lo que estaba de moda para mí.
Speaker 1Intentaba hablarlo a escondidas, con sus amigas o con la empleada doméstica de la casa.
Y mientras tanto, pensaba que tal vez, cuando por fin hablara francés perfecto, podría aprender creol.
Y con el creol ya podría hablar con los demás sin problema, sentirse menos como el bicho raro.
Pero de pronto, en 2004, la situación política de Haití rompió todo lo que Sandrine conocía.
Un golpe de Estado hundió al país en violencia y los papás de Sandrín decidieron irse.
El tema de la prohibición del creol quedaría en el olvido, pero años más tarde volvería a redefinir la identidad de Sandrín y la relación más complicada de su vida.
Nuestro editor senior, Luis Fernando Vargas, nos cuenta la historia.
Speaker 3El que acaban de oír es a Jean-Bertrand Aristide, el entonces presidente de Haití, en una conferencia de prensa internacional poco más de un mes antes del golpe de estado en su contra.
Dice, trataré de ser breve, una vez tengamos un golpe de estado, tendremos muerte.
El golpe finalmente ocurrió el 29 de febrero del 2004 y fue liderado por la oposición política y exmilitares y apoyado por los gobiernos de Canadá, Estados Unidos y Francia.
Haití estaba en una grave crisis económica, acusaban al presidente de corrupción, la violencia en las calles aumentaba y en circunstancias todavía no muy claras Aristide abandonó el país.
Aristide había ganado las elecciones por una inmensa mayoría, era un líder popular y la situación era tensa desde hacía semanas.
Muchos de sus seguidores estaban en las calles.
Había enfrentamientos entre los que apoyaban al presidente y la oposición.
Pero en medio de la inestabilidad también empezó el crimen.
Saqueos, secuestros, asaltos.
Y con la salida de Aristide, la violencia se volvió abrumadora.
Para Sandrín, que era una niña de seis años y no entendía todo eso, el golpe se vivió de una manera muy concreta.
Estar en casa.
Siempre.
El colegio se había suspendido completamente.
No salían a menos de que fuera estrictamente necesario, pero aún así era imposible obviar lo que estaba pasando.
A veces
Speaker 2en las noches se escuchaban muchos ruidos como gritos y protestas en la calle.
Speaker 3Y aunque no entendía mucho, le daba miedo, pues intuía algo.
Era peligroso, especialmente para su mamá cuando tenía que salir.
Al ser blanca, tenía miedo de que la secuestraran.
Speaker 2Ella tenía que vivir como escondida, ¿no?
Entonces si salíamos a hacer mercado, mi mamá tenía que reclinar la silla hasta abajo para que no la vieran.
Todos los hermanos de mi papá se hacían cargo como de acompañarla, tipo guardaespaldas, para que no le pasara nada.
Speaker 3Y no era un miedo infundado.
Al final, a pesar de las precauciones, la violencia sacudió a la familia.
No secuestraron a la mamá de Sandrine, pero sí a un tío.
Fueron dos meses de angustia hasta que decidieron pagar el rescate.
Lo dejaron libre, pero decidieron que lo mejor era irse.
El hermano menor de Sandrine tenía dos años.
A ella le dijeron que se iban para Colombia.
Pensó que serían unas vacaciones.
Speaker 2Cuando llegamos acá, pues sí me doy cuenta que ya estábamos en plan de buscar casa, buscar colegio para nosotros.
Entonces vi como tal vez no vamos a volver nunca.
Speaker 3A Sandrine la inscribieron en el liceo francés en Bogotá para su primer grado de primaria.
Ahí recibía la mayoría de materias en francés e incluso estaba más adelantada que los niños de su clase.
Lo complicado venía de otro lado.
Speaker 2Me costó tal vez los primeros meses y tener amigos.
Y por lo que te digo, como llega esta persona que dicen que es de Haití.
Haití siempre ha tenido como un estigma muy fuerte y es como, bueno, es el país más pobre de América Latina y uno de los más pobres del mundo.
Y siento que me veían como con esa, como, ay, pobrecita, ya no come, un poco en esa onda, ¿no?
Speaker 3Se resumía de nuevo en el color de su piel.
Si en Haití Sandrine era blanca o por lo menos mixta, en Bogotá era solo negra.
Y es que la población afrodescendiente en Colombia es de los grupos más desprotegidos y con mayores índices de pobreza en el país.
Hay estigma, especialmente en un colegio en el que en gran parte iba gente adinerada, como el suyo.
Al final se logró integrar.
Nunca recibió agresiones directas o discriminación explícita dentro del colegio, pero sí violencias más sutiles.
Speaker 2La historia se repetía.
Yo lo que recuerdo mucho es que no me sentí extraña porque yo ya había vivido el sentirme extraña en Haití.
Entonces allá era muy clara y la gente se preguntaba muchas cosas.
Ya llegando acá a Colombia era muy oscura y la gente se preguntaba cosas.
En el momento yo tal vez no pensaba mucho en eso porque era parte de mi vida.
En ninguno de los dos lados había sentido que pertenecía.
Speaker 3Mientras Sandrine crecía, las cosas en Haití se deterioraban aún más.
Su papá volvía constantemente al país para resolver cosas de sus negocios, pero Sandrine y su mamá solo iban durante el verano a una casa de campo y no salían de ahí.
Haití se sentía distante.
Pero todo empezó a cambiar en el 2010, un año devastador para el país.
Speaker 4Muy buenas noches, hace unos momentos un terremoto de 7 grados en la escala de Richter de más de un minuto de duración sacudió hoy Haití, el país más pobre del hemisferio americano.
Speaker 3En enero, un terremoto dejó más de 200.000 muertos y la infraestructura de gran parte de Haití en ruinas.
Speaker 4Hay quienes describen a través de internet que la situación es caótica.
Speaker 3Cerca de un millón y medio de personas quedaron sin hogar.
Y casi nueve meses después, otra desgracia
Speaker 5La trágica situación en Haití, ahora el drama es por el cólera que ha dejado hasta el momento más de mil muertos.
Ayer cientos de personas salieron a las calles para protestar por la lentitud del gobierno de Puerto Príncipe, la inacción para hacer frente a este brote de la epidemia.
Speaker 3Un brote de cólera terminó matando cerca de 10.000 personas.
El brote fue causado por el mal manejo de desechos de los soldados de la misión que las Naciones Unidas mantenían en el país desde 2004, para estabilizarlo después del golpe de estado contra Aristide.
Speaker 6En Cité Soleil, el mayor barrio pobre de Puerto Príncipe, los enfermos se asinan en estas tiendas de campaña antes de ser derivados a centros de tratamiento.
No hay suficiente espacio para atenderlos aquí.
Speaker 3Sandrine tenía 13 años y fue en ese momento que algo se activó en ella.
Era un malestar.
Esa tierra donde había sido tan feliz de niña y a la que se sentía todavía atada estaba en un dolor que no terminaba.
Y ella no podía hacer nada.
Speaker 2Yo creo que ya en el momento en el que dije, Dios mío,¿ por qué a este país le pasa tantas cosas malas?
Fue en el terremoto.
Pensaba mucho en cómo podíamos ayudar.
Recaudamos arroz, fríjoles como comida para poder enviar.
Mi papá, pues yo lo escuchaba hablar por teléfono y le decía, no, es que están vendiendo todo lo que ustedes mandaron.
Yo decía, pero, o sea,¿ cómo qué está pasando?
Speaker 3O sea, la gente que recibía los víveres los vendía en vez de entregarlos a las personas afectadas.
Así era el nivel de desesperación.
Dos años más tarde, en el 2012, Sandrine volvió a Haití después de bastante tiempo de no visitar.
Se encontró con un lugar diferente al de sus recuerdos, diferente físicamente, un país en intentos de reconstrucción, pero también distinto en actitud, hacia ella, hacia aquellos considerados extranjeros.
Su tono de piel decía mucho, desde siempre, pero ahora más.
Speaker 2Era como, ok, tú eres blanca y no te queremos aquí.
Y empezó a ser una amenaza el ser diferente a ellos, ¿no?
Speaker 3Y es que en ese momento, en el contexto haitiano, los blancos eran los cascos azules.
Así se les llamó a los soldados de la misión de las Naciones Unidas.
Hay un término en Haití, los bebés cascos azules o pequeños minusta, niños producto de violaciones y de otros actos de coerción hechos por soldados de la misión hacia mujeres haitianas.
Por ejemplo, dar monedas a unas mujeres viviendo en extrema pobreza a cambio de sexo.
Muchos de estos soldados eran soldados mestizos o blancos que dejaron solas a las mujeres para que criaran a sus hijos en condiciones dificilísimas.
Para ese momento, la misión llevaba casi 10 años en Haití y gran parte de la población cuestionaba si había hecho más mal que bien.
Además de los abusos, había reportes de violencia hacia civiles de parte de los soldados.
La gente desconfiaba.
Y a pesar de su renacida curiosidad por el país, Sandrine creyó que esa sería su última visita.
Su abuela y algunos hermanos de su papá habían emigrado hacía unos años a Estados Unidos.
Otro vivía en Haití, Panamá.
Prácticamente quedaba su abuelo, que se había negado a irse.
El país que ella recordaba ya no existía.
Los años siguientes fueron duros para Sandrine.
En Bogotá siempre estaba el tema de su raza, el sentirse extranjera, pero también la relación con su papá se fue complicando.
Speaker 2La relación con mi papá sí siempre fue muy compleja porque hay muchas cosas que yo no entendía.
Digamos, en el colegio él era muy duro conmigo y siempre esperaba más.
Speaker 3Sandrine siempre sintió que él esperaba que ella fuera como él.
Además de médico, tenía una maestría en ciencias políticas.
Si son colombianos, tal vez han escuchado su nombre en medios alguna vez.
Jean-Marie Exil, pues entre el 2020 y 2022 fue embajador de Haití en Colombia.
Así que él le exigía ser mejor que todos los demás, pero no lo pedía contacto.
Ella lo sentía como un mandato.
Tenía que destacar, no importaba otra cosa.
Speaker 2como las calificaciones tenía que ser la mejor.
Al pensar, digamos, ya que iba a estudiar, él me decía, es que te tienes que ir del país, o sea, tú no puedes estudiar en Colombia.
Todo esto siempre desde el amor, pero también desde una actitud como muy impuesta.
Speaker 3Cuando iba a graduarse del colegio, empezó un tema complejo, su carrera.
Speaker 2Y me dice, y te vas para Canadá, porque pues allá no vas a perder el francés y empiezas a implementar el inglés.
Y ya, pues, como si fuera un plan.
Speaker 3Él también tenía decidido que iba a estudiar Sandrine.
Aunque a ella siempre le había llamado la atención el periodismo, a su papá no le gustaba la idea.
Le impuso estudiar relaciones internacionales y ella obedeció, pero empezaba a sentir rencor.
Speaker 2Era mucha rabia porque yo decía, este señor me está diciendo qué tengo que hacer y qué tengo que dejar de hacer y esto no me gusta.
Y siempre era con peleas y yo le llevaba la contraria y sí había mucho resentimiento.
Speaker 3En medio de sus estudios en Canadá, sus papás se divorciaron, lo que generó aún más distancia con él.
Entonces, después de graduarse y contra el deseo de su papá, Sandrine decidió volver a Colombia y logró empezar a trabajar en periodismo.
Fue ahí donde vio una manera de conectarse de nuevo con Haití, después de años de lejanía.
Comenzó a tratar de hacer notas cuando veía la oportunidad.
Speaker 2Empezaba a buscar contactos, mi papá me los pasaba o familiares de mis papás que yo les decía necesito pues más o menos como este personaje si existe envíenmelo.
Y resulta que estas personas pues claro me mandaban por WhatsApp el contacto, pero yo me daba cuenta que no tenía ni idea de cómo comunicarme con esta persona.
Entonces me decían solo habla creol y yo ok, como entrevisto a alguien esto sí es muy grave.
Speaker 3Con lo mínimo que recordaba de cuando trataba de hablar a escondidas cuando era niña y mezclado con el francés, Sandrine les contestaba.
Pero la comunicación era difícil y fue en ese momento en que la extraña regla de no hablar creol volvió al centro de su vida.
Y es que parecía que su familia paterna no estaba interesada en mantener ese vínculo con Haití.
Varios tíos se habían ido del país y ninguno de sus hijos hablaba creol, tampoco el hermano menor de Sandrine.
Entonces fue ahí que tomó la decisión.
Iba a aprender a pesar del miedo a lo que dijera su papá.
Encontró tutoriales de YouTube, veía noticias en creol, videos de gente hablando y tomó algunas clases virtuales.
También usó una aplicación para aprender idiomas y como una forma de confrontación decidió empezar a practicar con una persona en particular, su papá.
Speaker 2Para ir practicando, yo llamaba a mi papá y lo saludaba en creol.
Y pues mi papá se reía como,¿ por qué estás haciendo esto?
Como que él no entendía muy bien, pero tampoco me tomaba muy en serio.
Speaker 3tal vez para evitar el conflicto.
Lo del Creol ya se sentía como un tema que para él se había acabado.
Por un tiempo, Sandrín siguió cubriendo Haití cuando podía desde Colombia, pero la crisis del país después del asesinato del presidente Jovenel Moïse en el 2021 era demasiado profunda.
Golpes de estado, violencia, crimen, desastres naturales, epidemias mortales, una lista de tragedias que parecía interminable.
Speaker 2No sé, sentía en mi corazón que yo era la persona que tenía que estar allá contando todo lo que estaba sucediendo.
No por ser super heroína ni mucho menos, pero sí porque tengo este lado que apagué por mucho tiempo y yo lo hago un poco porque siento que le debo a este país una parte de lo que soy también.
Speaker 3Así que decidió que tenía que volver.
Quería contar el día a día de la gente, ver otro Haití que no se ve en las noticias.
Tenía que vivir ahí.
Sabía eso, pero no tenía un plan concreto.
Tal vez sería solo por un tiempo, tal vez no.
Pero no le pidió consejo a nadie, solo informó.
Speaker 2Un poco lo que le dije a mi papá fue, señor,¿ me voy?
No,¿ qué te vas a ir a hacer allá?
Yo te quería para que fueras a vivir, no sé, en Canadá, Estados Unidos, Europa.
Y le dije,¿ cómo no?
Speaker 3No, para ella no había nada que discutir.
Su papá estaba furioso, pero después de unas semanas, él se dio cuenta de que ella no iba a cambiar de opinión.
Solo le dijo.
Speaker 2Las cosas ya no son fáciles.
El tema de los secuestros está muy fuerte.
Los asesinatos también están muy fuertes.
Me dijo, yo espero que no lo estés haciendo como un juego, ni por dártelas de corresponsal de guerra.
Quiero que seas muy consciente a lo que te vas a enfrentar y a lo que vas a ver.
Speaker 3Y así, en marzo del 2024, tomó un avión como lo hizo 20 años antes cuando fue el golpe de estado, pero ahora de vuelta a Puerto Príncipe.
Llevaba una maleta grande, llena, suficiente para empezar de cero, de nuevo.
Y también, a pesar de que no se lo admitiera a sí misma ni a su familia, con miedo.
Speaker 1Una pausa y volvemos.
Estamos de vuelta en Raambulante, aquí Luis Fernando.
Al llegar a
Speaker 3Puerto Príncipe, en el carro de ida a casa de un tío, Sandrine se encontró con un país todavía más distinto al que había visto en su adolescencia.
Speaker 2Era estar viendo un campo de guerra.
Ya el campo de Marte no existe.
Desde 2010 no hay Palacio Nacional.
La gente viviendo en las calles, los niños sin ropa, pidiendo comida, todo el mundo pidiendo comida.
Era otro ambiente completamente distinto a lo que había vivido antes y para mí fue súper chocante.
Speaker 3Al día siguiente empezó a moverse, a establecer contactos, buscar trabajo.
Speaker 2Llegué jugando al local creyendo que la gente me iba a aceptar y que todo súper bien.
Speaker 3Pero pronto se dio cuenta que las cosas no iban a ser fáciles.
Para los demás, ella no era local.
Speaker 2Y todos me dicen, ti blon, ti blon, ti blon.
Speaker 3Eres blanca.
Speaker 2Señoras diciéndome que sí podía adoptar a sus hijos, que ellos me regalaban a sus hijos.
Y yo les decía que yo vivo acá.
Y quedaban en shock porque, pues, o sea, para ellos yo soy extranjera y vengo de un mundo completamente favorecido y bendecido e iluminado.
Speaker 3Sandrine sabía que era cierto, que su privilegio era muchísimo, que había estado fuera cuando había pasado lo peor.
Pero aunque les decía que ella era de ese mismo país, no era fácil llamarse a sí misma haitiana en esos días.
Pero encontró una alegría, su abuelo, Levoy Exil.
Levoy es uno de los pintores más famosos de Haití.
Cuando Sandrine era niña, lo visitaba en su taller de pintura.
Tenía una clase para los más pequeños y los papás de Sandrine la dejaban ahí para que él la cuidara.
Amaba esos momentos en los que pintaba y veía pintar a su abuelo, aunque no podían hablar mucho por la barrera del idioma.
Él no habla francés y a pesar de esto, la regla de su papá siempre aplicaba.
Él hablaba en creol, ella en francés y así se entendían un poco.
Pero siempre se sintió muy cuidada por él y al volver ahora grande no fue diferente.
Speaker 2Me sentí increíble.
Fue como abrir una puerta, tenía cerrada.
Speaker 3Abrir una puerta cerrada.
Ahora solo Sandrine podía practicar su creol con él e intentar tener conversaciones que siempre quiso tener desde niña.
Y fue hermoso.
Speaker 2Mi abuelo es la persona más divertida del planeta Tierra.
Speaker 3Siempre anda de buen humor y cantando.
Speaker 2A veces simplemente lo llamo para que me cante.
Speaker 3Le cuenta historias sobre el país y su cultura de formas que Sandrine nunca había escuchado.
Ha sido como conocer un Haití nuevo, oculto entre noticias de desastres.
Speaker 2No hay cosa más bella que poder hablar con mi abuelo y preguntarle un poco de la historia de Haití.
porque no te la va a contar como en un libro, no te la va a contar como no, sino de esta forma extremadamente mística que hace sentido.
Y sé que ninguno de mis primos tiene esa ventaja de poder sentarse con el abuelo y que el abuelo les cuente de dónde venimos, quiénes somos y por qué tenemos que estar seguros de nosotros mismos, creernos que somos poderosos.
Es otro nivel.
Speaker 3Nunca se había sentido tan ligada a Haití como en esas conversaciones.
Con el creol, Sandin se ha puesto una nueva meta.
Ya no solo tratar de que el mundo entienda Haití, sino intentar llevar el mundo a los haitianos, aislados en gran parte por su idioma.
Quiere explicarles todo lo que hay más allá de sus costas, que se siente tan lejano.
Por eso empezó a trabajar con medios haitianos cubriendo el exterior.
Lo que no esperaba es que ese esfuerzo profesional también empezaría a sanar asuntos personales, específicamente con su papá.
Todo empezó con las elecciones presidenciales del 2024 en República Dominicana, que Sandra Incubio creó para un canal de la televisión haitiana.
Le mandó el video a su papá, a ver qué decía.
Lo hizo con un poco de miedo, pero su reacción la sorprendió.
Speaker 2Mi papá no entendía absolutamente nada de lo que estaba pasando.
O sea, él me decía, yo pensé que tú ibas a cubrir en español.
Claro, también fui a cubrir para español, pero pues nos pidieron que hiciéramos esto.
Y mi papá decía,¿ en qué momento aprendiste a hablar tan bien?
Speaker 3Su papá no tenía idea del esfuerzo que ella estaba haciendo con el creol.
Y de repente le empezaron a llegar mensajes de sus tías, de su abuela, que viven en el exterior.
Speaker 2Mi papá se lo mandó a toda mi familia, o sea, el orgullo pues de la familia lo mandó al chat, todos como no puedo creerlo, yo pensé que Sanri no hablaba creol, mi abuelo impactadísimo, incluso la familia por parte, mi mamá me decía, yo sabía que algo se te había quedado en la cabeza, como impresionante que lo hayas hecho así, improvisado.
Speaker 3Fue un momento extraño.
Se sintió bien, claro, pero toda la vida su papá le había dado señales de que hablar creol era motivo de sanción.
Y de repente estaba orgulloso, incluso enviándoselo a toda su familia.
No entendía.
Necesitaba hablar con él.
Speaker 1Después de la pausa, volvemos con el papá de Sandrine.
Estamos de vuelta en Reambulante.
Aquí la charla de Sandrine con su papá, Jean-Marie
Speaker 7Hace unos meses, Sandrine se sentó con él
Speaker 2en Bogotá.
Speaker 7Mi nombre es Axel, soy haitiano, soy terapeuta respiratorio de carrera y soy politólogo.
Yo soy ex embajador de Haití en Colombia.
Speaker 3Sandrin tenía muy claro cuál era el objetivo de la conversación.
Speaker 2Escuchar ya como su lado de la historia y enfrentarlo porque fue un enfrentamiento.
Ponerlo entre la espada y la pared y que aceptara que sí, que había coaccionado el hecho de que yo no aprendiera, o sea que él había estado ahí metido.
Speaker 3Quería que aceptara abiertamente que había sido un error no haberla dejado hablar Creol.
Es un tema que han tocado de manera medio fragmentada en los últimos años, a veces con mucha rabia por parte de ella.
Nunca ha sido fácil, pero Sandrine quería intentarlo una última vez para esta historia.
Speaker 2No.
Primero contéstame.
Bueno.
Speaker 3La decisión
Speaker 2de no enseñarnos o no criarnos
Speaker 7en Creol.
Bueno, en el caso suyo especialmente.
Cuando vivía acá, a los tres años, se fue para Haití.
Entonces estuvo en un colegio francés.
En este colegio, por lo general, el creol es automático.
De alguna manera usted no va a hablar, pero el francés toca ser muy estratégico para que lo hablan.
La estrategia era hablar francés y el creol es automático.
Speaker 2Pero me impediste un poquito el creol.
Speaker 7No le impedí, ya le dije que fue una estrategia, pero no fue impedimiento.
De mi parte.
Speaker 2O sea, una estrategia para que aprendiera bien el francés.
Exactamente.
Pero ya pasaba el creol a un segundo plano.
Speaker 7No a un segundo plano, siempre lo va a aprender.
Speaker 3Es la respuesta que Sandrín siempre ha recibido cuando toca el tema.
Él nunca acepta que lo prohibió y siempre hace énfasis en esa palabra.
Speaker 2Él las llama como estrategias para navegar el mundo, ¿no?
Me cuentan que tú decías, o sea, tú me impedías hablar en creol.
O sea, que a mí me tocaba hacerlo a escondidas con Mari, con...
Speaker 7Exactamente.
Entonces, cuando usted hace énfasis...
en francés pues lo va a perfeccionar pero por debajo de cuenta ya lo está aprendiendo pero pues hay que hablar francés por lo mismo que pasa en inglés
Speaker 3Lo mismo que pasa en Haití.
La pobreza, la falta de educación, la violencia, la falta de institucionalidad.
Y aquí hay que entender algo.
Su papá se fue a estudiar medicina a Colombia siendo joven porque el país, en esa época, estaba viviendo una crisis política no muy distinta a la que motivó su salida unos años después.
Era la mejor oportunidad que tenía para una mejor vida.
Y eso marcó su visión de mundo.
Speaker 7Naciendo en Haití, constantemente uno debe de estar luchando.
Si no, va a estar en la miseria.
Speaker 3Pero a pesar de eso, Sandrin se dio cuenta en esta conversación que él nunca quiso quedarse en Colombia.
Speaker 7Mi plan A siempre fue Haití.
Por eso tan pronto terminé, me fui para allá.
Monté mi clínica, su mamá estaba trabajando.
Speaker 3Por eso su insistencia con el francés, porque siempre le habían enseñado que era el idioma que permite llevar una vida mejor ahí.
Y él siempre se lo dijo.
Sandrine es mujer y negra.
Su vida, de todas maneras, va a ser difícil, sin importar las circunstancias.
Speaker 2Entonces, en un mundo donde yo soy mujer, soy negra y, digamos, hablara solo creol, seguramente el enfrentamiento o la navegación en el mundo habría sido muy distinto a las opciones que he tenido hoy en día.
Speaker 3El plan de su papá de hacer vida en Haití fue imposible.
Se tuvo que ir porque quería una vida para su familia que el país no les podía dar.
Sandrine entendió que esta es una herida que su papá siempre tendrá y todos los días él piensa en cómo ayudar.
Speaker 2Asumió el trabajo como embajador por un tiempo, justamente buscando eso.
Y creo que es parte de lo que pasa con mi papá al ver tantas oportunidades que, por ejemplo, le ha dado Colombia.
O sea, si él pudiera traerse a los 12 millones de haitianos que están en Haití y que vean cómo funcionan las cosas en Colombia, que no es el país ejemplo número uno para destacar, pero donde las cosas funcionan muchísimo mejor que en Haití, él varía.
Speaker 3Jean-Marie cree que un paso importante es tender puentes con el resto del mundo para que los haitianos tengan más oportunidades de salir del ciclo de violencia y pobreza.
Y eso se logra en parte con los idiomas.
Speaker 7Haití es un país totalmente aislado en tema de idiomas.
Entonces, para reconstruir Haití, nosotros tenemos que hacer muchos esfuerzos.
Fíjese, alrededor de nosotros...
Todos los países hablan español, inglés.
Nosotros solamente hablamos creol y francés.
Entonces, Haití necesita fortalecer los idiomas.
Yo siempre dije, mis hijos deben hablar todos esos idiomas.
Y bien, a la par.
Speaker 3Porque así, sus hijos podrán ayudar en la tarea.
A veces Sandrine siente que su papá pudo haber tomado otro camino, uno en el que la exigencia no se volviera temor y rencor, un camino más amoroso, más libre.
Hablar ha empezado a sanar las cosas.
Faltan bastantes, pero entender de dónde vienen las decisiones que su papá ha tomado le ha ayudado.
Speaker 2Creo que fue un encuentro muy bonito, entendiendo que desde su posición como migrante no era tan fácil elegir entre qué y qué, más cuando ha escuchado toda su vida que el creol no era lo que abría puertas.
Speaker 3Pero recientemente ha visto un cambio en su papá que la pone feliz.
Hace un año, Jean-Marie tuvo otro hijo con su nueva pareja.
Y cuando Sandrine ha visitado la casa de la nueva familia de su papá, ha notado algo.
A su hermanito sí le hablan creol.
Speaker 2Y ahora que existe Jojo, he notado que eres muy en pro de hablarle creol.
Speaker 7Por los mismos errores.
Speaker 2O sea, sí aceptas que cometiste un error.
Speaker 7Pero pues no es lo mismo, ¿no?
Es
Speaker 2lo mismo, es lo mismo.
Hoy en día tú le hablas a Jojo en creol.
Speaker 7Por eso.
Fíjese, en el caso suyo, estuviste en Haití, pero si usted está en Colombia, pues hay que hacer el esfuerzo para aprender el idioma.
Speaker 2Pero ahorita dijiste, para no cometer el mismo error.
Speaker 7No es para no cometer, son estrategias.
Speaker 2Por qué no lo aceptas?
No
Speaker 7pero la idea nunca es dejar de hablar el idioma, sino estrategias, en el caso suyo que vivía en Haití.
Speaker 3A su papá se le escapó la palabra error.
Nunca lo había dicho.
Tal vez la pelea de años de Sandrin por volver al creol, Haití, sí cambió algo en él.
Tal vez le mostró que ese idioma no siempre es una sentencia terrible.
Tal vez entendió que Sandrin se siente más haitiana al hablarlo.
Y tal vez él quiere que su nuevo hijo sienta lo mismo.
Speaker 1Haití atraviesa una crisis humanitaria sin precedentes.
En 2025, más de 4.000 personas han sido asesinadas y 1.300.000 han sido desplazadas internamente, según la ONU.
Además, esta organización estima que el 90% de la capital, Puerto Príncipe, está bajo el control de las pandillas.
Sandrine Exil es periodista internacional colombo-haitiana.
Vive entre ambos países.
Luis Fernando Vargas es editor senior de Rao Ambulante.
Vive en San José, Costa Rica.
Esta historia fue editada por Camila Segura y por mí, Bruno Selsa, y hizo la verificación de datos.
El diseño sonido es de Andrés Aspiri, con música original de Remy Lozano, Ana Tuirán y Andrés.
El resto del equipo de Ramblante incluye a Paola Leán, Adriana Bernal, Aneris Casasuz, Diego Corzo, Emilia Arbeta, Camilo Jiménez Santofimio, Melissa Rabanales, Natalia Ramírez, David Trujillo y Elsa Liliana Ulloa.
Carolina Guerrero es la CEO.
Ramblante es un podcast de Ramblante Studios, se produce y se mezcla en el programa Hindenburg Pro.
Soy Daniel Alarcón.
Gracias por escuchar.